18 de Septiembre
de 2012
En esta clase se
ha tratado el primer bloque para tener unos cimientos básicos de la Tecnología
Educativa. En este primer bloque hemos indagado sobre las Fuentes de la
Tecnología y los Modelos de Comunicación que existen entre los humanos.
Las Fuentes de la Tecnología
Estas dos
grandes tradiciones se generaron en los años 60, la europea y americana,
irónicamente denominada Alta y Baja Iglesia por el invesigador Steve Fuller
(1992).
La tradición europea se preocupó
por los orígenes epistemológicos y sociales del conocimiento, como reacción a la
tradicional filosofía positivista de la ciencia, la cual se centraba únicamente
en los aspectos epistémicos de las teorías, sin mayor articulación con el campo
social. Tuvo como sede inicial la Universidad de Edimburgo; su preocupación
fundamental era el estudio de la naturaleza social de la ciencia. Sus
principales fuentes de inspiración se basaban, además de la sociología clásica
del conocimiento, en una interpretación radical de la obra de Thomas Kuhn, La estructura de las revoluciones
científicas (1962). Esta
línea, con mayor enfoque disciplinar, recuperaba la noción historicista al
considerar que la ciencia sería ante todo un asunto de consenso de una
comunidad de investigadores que comparten un paradigma que cambia
históricamente. Otras raíces filosóficas y antropológicas de esta tradición
señalaban que el significado de los pensamientos y de los actos se integraba
siempre en un contexto cultural. La segunda tradición, de origen
norteamericano, estuvo centrada en las consecuencias del conocimiento
científico y tecnológico en los diferentes espacios de la sociedad. Con un
carácter más interdisciplinar, sus campos de acción han sido la ética, la educación
y la política pública, principalmente. La historia de esta tradición no parte
de la obra de Thomas Kuhn, sino de los movimientos sociales y ecologistas de la
década de los años sesenta, y de pensadores como Jacques Ellul, que se
concentraba en la crítica a la autonomía de la tecnología a partir de su
clásica obra El Siglo XX y la
Técnica (1954), y de los
trabajos del historiador de la tecnología Lewis Mumford a partir de su
destacada obra Técnica y
Civilización (1934).
Diego Moñux
Chércoles cita en un artículo “Hacia una comprensión de las relaciones entre
tecnología, sociedad y desarrollo” que uno de los primeros filósofos que reflexionó
sobre la tecnología fue José Ortega y Gasset, su Meditación
de la técnica (1939). Ortega considera al ser humano como un ser
técnico en la medida en que “la técnica es lo contrario de la adaptación del
sujeto al medio, puesto que es la adaptación del medio al sujeto” y entiende
que está en su naturaleza proyectarse más allá de sus necesidades biológicas.
Recordemos que Ortega y Gasset es un representante de la tendencia europea.
A continuación
se exponen de forma gráfica dos formas de entender el Conocimiento Científico,
la Sociedad y la Tecnología.
DIFERENCIA ENTRE LAS
DOS TRADICIONES CTS
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TRADICIÓN EUROPEA
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TRADICIÓN AMERICANA
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Institucionalización
académica en Europa (en sus orígenes).
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Institucionalización
administrativa y académica en Estados Unidos (en sus orígenes).
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Énfasis en los factores
sociales antecedentes.
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Énfasis en las consecuencias
sociales
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Atención a la ciencia,
y secundariamente, a la tecnología.
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Atención a la Tecnología y,
secundariamente, a la ciencia.
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Carácter teórico y
descriptivo.
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Carácter práctico y
valorativo.
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Marco explicativo:
ciencias sociales (sociología, psicología, antropología, etc.)
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Marco evaluativo: ética,
teoría de la educación, etc.
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MODELOS TEÓRICOS PARA ENTENDER LA COMUNICACIÓN
Recuerdo los modelos para entender la
comunicación que dimos en 2º de carrera y tuve que exponer el Modelo
Sociológico de Paul Watzlawitz y me parecieron realmente interesantes todos sus
axiomas.
Miguel Rodrigo, Catedrático de Teoría de
la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona, posee un artículo muy
interesante sobre Modelos de Comunicación e introduce el mismo apostillando que
a un Modelo no se le puede pedir que tenga en cuenta todos los elementos
existentes en la realidad porque sería innecesario e inútil. Sería innecesario,
porque no vale la pena hacer una copia exacta de la realidad si ya tenemos la
propia realidad. Sería inútil, porque la realidad es tan compleja que un modelo
que diera cuenta de todos sus elementos sería inmanejable.
El problema no está tanto en el
reduccionismo en sí mismo, sino que no sea consciente del mismo y se
autorepresente como una propuesta omnicomprensiva de la realidad.
Un modelo es una construcción
teórico-hipotética de la realidad. Es un postulado de interpretación de la
realidad: describe y explica la realidad definida. Esta explicación se hace a
partir de un principio racional que es el que da congruencia al modelo. Este
principio racional es el que determinará cuáles son los elementos
significativos para el modelo y cuáles no van a tener en cuenta.
En cada momento histórico los modelos han
cumplido distintas funciones. Por un lado, cada modelo intentaba dar
explicación a los cuestionamientos que su objeto de estudio le planteaba. Por
otro lado, cada momento reflejaba y colaboraba con la evolución de las Teorías
de la Comunicación.
El profesor Ernesto Cesar Galeano nos
habla del modelo teórico matemático de Shannon y Weaver que explican la
comunicación:
En 1948,
Shannon y Weaver lanzaron una teoría matemática de la comunicación, casi al
mismo tiempo que Laswell, elaboran su fórmula de cinco elementos. Se trata de
un modelo de comunicación o, más exactamente, de una teoría de la información
pensada en función de la cibernética, la cual es el estudio del funcionamiento
de las máquinas, especialmente las máquinas electrónicas. Cuando Shannon habla
de información, se trata de un
término con un sentido completamente diferente del que nosotros le atribuimos
generalmente (noticias que nos traen diariamente la prensa, la radio y la TV).
Se trata para él de una unidad cuantificable que no tiene en cuenta el contenido
del mensaje.
El modelo de Shannon se aplica entonces a cualquier mensaje, independientemente
de su significación. Esta teoría permite sobre todo estudiar la cantidad de
información de un mensaje en función de la capacidad del medio. Esta
capacidad se mide según el sistema binario (dos posibilidades, O ó 1) en bite (bínary digits) asociados a la velocidad de transmisión del mensaje, pudiendo esta velocidad
ser disminuida por el ruido.
El modelo de Shannon se representa por un
esquema compuesto por cinco elementos: una fuente, un transmisor, un canal, un
receptor, un destino. Dentro de este modelo incluimos el ruido, que aporta una
cierta perturbación.
Los elementos
del modelo de Shannon y Weaver
a) La fuente:
es el elemento emisor inicial del proceso de comunicación; produce un
cierto número de palabras o signos que forman el mensaje a transmitir. Por
ejemplo, puede ser la persona que, habiendo descolgado el teléfono y marcado el
número, comienza a hablar. Puede ser, del mismo modo, el parlante de la radio o
de la TV.
b) El transmisor:
es el emisor técnico, esto
es el que transforma el mensaje emitido en un conjunto de señales o códigos que serán adecuados al canal encargado de transmitirlos.
Así, en nuestro ejemplo, el transmisor transformará la voz en impulsos
eléctricos que podrán ser transmitidos por el canal.
c) El canal:
es el medio técnico que
debe transportar las señales codificadas por el transmisor. Este medio será, en
el caso del teléfono, los cables, o la red de micro-ondas utilizada por la
empresa telefónica en comunicaciones internacionales.
d) El receptor:
también aquí se trata del receptor técnico, cuya actividad es la inversa
de la del transmisor.
Su función consiste entonces en decodificar el
mensaje transmitido y vehiculizado por el canal, para transcribirlo en un
lenguaje comprensible por el verdadero receptor, que es llamado destinatario.
Es entonces el aparato telefónico, el receptor de
radio o el televisor.
d) El destinatario:
constituye el verdadero receptor a quien está destinado el mensaje. Será
entonces la persona a quien se dirige el llamado telefónico o el conjunto de
personas audiencia de radio o de TV.
f) El ruido:
es un perturbardor, que
parasita en diverso grado la señal durante su transmisión: “nieve” en la
pantalla de TV, fritura o lloro en un disco, ruidos de interferencia en la radio,
también la voz demasiado baja o cubierta por la música; en el plano visual
puede ser una mancha sobre la pantalla, un cabello en el objetivo del
proyector, una falla de registro gráfico, etc. También se debe considerar, muy
especialmente, el ruido no técnico.
Esto es, aquel que proviene del contexto psicosocial. Todos los elementos
precedentes son considerados como ruidos que pueden, entonces, provenir del
canal, del emisor, o del receptor, del mensaje, etcétera.
El modelo de Shannon y Weaver es muy atractivo debido
a su relativa sencillez y flexibilidad.
No obstante, análisis más detenidos muestran que en
realidad no es mucho más que un modelo E-R ampliado. Dicho modelo explica poco
sobre la comunicación humana.
Sin embargo el modelo de Shannon y Weaver
ha demostrado ser muy útil y ha aparecido un sinfín de versiones en libros de
texto sobre comunicación humana.
Modelo Sociológico explicativo de la
Comunicación
Paul Watzlawick (1921-2007) es uno de sus representantes,
veamos la biografía del mismo:
Nació en
Villach, Austria en el año 1921. Estudio en la universidad de
Venecia las carreras de filosofía y lenguas modernas, y, posteriormente hizo
prácticas de psicoterapia en el Carl Jung-Institut de Zurich, Suiza. A la edad de 36 comenzó a
ejercer como docente en la universidad de San Salvador y luego se integró en el
Mental Research Institute en Palo Alto,
California. Permaneció en Palo Alto hasta el final de su carrera
académica en donde también enseño en la universidad de Standford. Fue uno de
los principales autores de la Teoría de la comunicación humana y del
constructivismo radical, y de importante referencia en el campo de la terapia
Sistemática y la psicoterapia.
Junto a
dos colegas (Jackson y Beavin) publico Human communication en el año 1969. En este libro crean las bases de
su construccionismo sistemático, el cual abarcara la comunicación y como se
percibe la realidad. El 31 de marzo del 2007 fallece en Palo Alto, California
luego de llevar tiempo sufriendo una grave enfermedad.
En su vida
escribió varios libros, entre los más conocidos (varios de los cuales fueron
traducidos al español) encontramos: Teoría de la comunicación, Cambio, El
lenguaje del cambio, la realidad inventada y muchos otros.
Menciona
dos realidades, la de primer rango, que es contada por la objetividad de su
estado físico, y la de segundo rango, en la cual interviene la subjetividad
compleja del significado que le damos. Se llega a la conclusión de que no hay
una sola “realidad real” sino varias representaciones de la realidad, las
cuales se ven influenciadas por los estados “patológicos”. En su carrera
escribe cinco axiomas relacionados a la teoría de la comunicación humana:
1.
Es imposible no comunicarse: todo
comportamiento comunica.
2.
Toda comunicación tiene un nivel de contenido
y un nivel de relación en donde el último clasifica al primero creando una
metacomunicación: la comunicación tiene el significado de las palabras
acompañado por cómo quiere en enunciador ser entendido y como quieren que lo
entiendan, el receptor a su vez entiende el mensaje e interpreta, para
finalizar, el primero actuara ante esta respuesta.
3.
La naturaleza de una relación depende de la
gradación que los participantes hagan de las secuencias comunicacionales entre
ellos: el emisor y receptor inician una comunicación en la cual cada uno
interpretaran su propio comportamiento como mera relación ante del otro. A su
vez, cada uno cree que su conducta es la causa de la conducta del otro, algo
que no es así. El proceso es más bien cíclico (no solo causa-efecto).
4. La comunicación humana implica dos
modalidades: la digital y la analógica. La digital pose un carácter más
abstracto, se limita al lenguaje, a las palabras habladas (lo que se dice);
mientras que la comunicación analógica es la comunicación no verbal (lo que se
quiere decir) se construye a partir del contenido y el contexto. Es por esta
razón por la cual Watzlawick dice que comunicar es un proceso de interacción
que forma el conocimiento.
5. Los intercambios comunicacionales pueden ser
tanto simétricos como complementarios: esto depende si la relación entre las
personas está basada en intercambios igualitarios (conducta reciproca), o si
está basada en intercambios aditivos en donde uno y otro se complementan
produciendo un acoplamiento reciproco de la relación. Una relación
complementaria presenta algún tipo de autoridad como padre e hijo, mientras que
una relación simétrica es la que presenta series de iguales condiciones (entre
hermanos o amigos).
EL MODELO SEMIÓTICO PROPUESTO POR UMBERTO ECO
Miguel Rodrigo, catedrático de Teorías de
la Comunicación de la Universidad de Barcelona dice que el modelo semiótico propuesto por Umberto Eco gira en torno al
concepto de código y a la descodificación del destinatario. Como se puede
apreciar tiene una clara influencia del modelo de Shannon y Weaver, por un
lado, y, por otro lado, retoma las preocupaciones explícitas en el modelo de Schramm
sobre los efectos de los mensajes.
En este modelo no se plantea la existencia de un solo
código compartido entre emisor y destinatario, sino una multiplicidad
de códigos. En el esquema de Shannon
y Weaver el código era el elemento común entre emisor
y receptor, que permitía que se produjera
la descodificación del mensaje. Para Eco (1977:
249) el proceso de codificación y de descodificación se complica: "la propia multiplicidad de los códigos y
la infinita variedad de los contextos y de las circunstancias
hace que un mismo mensaje pueda codificarse desde puntos de vista diferentes y por referencia a sistemas de convenciones
distintos." Además, los
subcódigos son independientes en el emisor y en el receptor, mientras que sería condición necesaria que hubiera
cierta coincidencia en el código.
Esta necesidad
de como mínimo una cierta coincidencia de códigos se ve muy claramente en la comunicación intercultural.
Los subcódigos son varios: ideológico,
estético, afectivo, etc. Todos estos subcódigos inciden en los procesos de codificación y descodificación aportando una nueva información más allá de la simple denotación
del mensaje. Pero también intervienen
en la codificación y la descodificación
los elementos contextuales y circunstanciales.
El contexto hace referencia a los elementos del
entorno en que se produce el mensaje. Según en que contexto aparece un
mensaje, manteniéndose la expresión,
sin embargo puede cambiar totalmente su contenido. Recordemos la escena de Tiempos modernos en la que
Charles Chaplin recoge una bandera roja que
se ha caído de un camión cargado de maderas y que, a pesar de sus esfuerzos, no puede volver a colocar, en
el vehículo que se aleja, este signo de peligro.
Justo en el momento que Charlot que queda dubitativo con la bandera en la mano aparece detrás de él, doblando la
esquina, una manifestación obrera que es,
en este instante, disuelta por la policía. Inevitablemente Charlot es detenido por la policía como abanderado de la
revolución, ya que en este contexto la bandera
tiene un contenido diferente al de su situación originaria. Emisor envía el siguiente mensaje a un destinatario, su
contenido puede ser muy distinto según dos
posibles circunstancias: "Te deseo que seas todo lo feliz que te
mereces". Si el emisor es la
mejor amiga del destinatario el contenido es uno, pero si el emisor es la expareja del destinatario, con
la que ha roto después de una tormentosa
relación para irse con su hermana, podríamos pensar que el significado es otro totalmente
distinto. Un elemento muy importante en este modelo
es el diferenciar el mensaje como fuente de la información (expresión) y el texto interpretado como el
contenido del mensaje, después que el destinatario lo ha interpretado de acuerdo con sus códigos y subcódigos, y
el contexto y las circunstancias
existentes.
Este
cambio en el modelo es muy relevante porque plantea que el receptor lleva a cabo una lectura personal del mensaje. Eco (1977:252) señala que pueden darse
descodificaciones aberrantes. Pero entendiendo por "aberración" exclusivamente la traición a las intenciones
del emisor. Por ejemplo, uno puede encontrar,
en la actualidad, absolutamente risibles los discursos del general Franco o sentir una entrañable ternura
hacia el anoréxico vampiro de la película Nosferatus,
que difícilmente podría causar miedo en una persona adulta, como se pretendió en su momento. Es decir, más allá
de la intencionalidad comunicativa del
emisor tenemos las emociones no programadas por éste, pero que se producen en el receptor. Esto pone de
manifiesto que, en la comunicación, no siempre
es evidente comprender el mensaje y/o compartir el contenido del mensaje. Los estudios de recepción ponen de manifiesto, precisamente, cómo se negocian los significados de los discursos
compartidos.
Este
modelo se preocupa principalmente del proceso de descodificación del receptor. Eco (1985:175) se ha preocupado de
cómo la audiencia reinterpreta los mensajes
mediáticos, así señala:
a)
por sí solos los Mass media no pueden formar la manera de pensar de una generación.
b)
si esta generación actúa de forma distinta del sistema conductual propuesto por los Mass media, esto significa
que ha descodificado el contenido de los mismos
de forma diferente de cómo los hacían los productores de los mensajes y parte
de los que los consumían de otro modo.
Este
modelo de Eco se basa fundamentalmente en una teoría de los códigos. Pero, posteriormente se hicieron una serie de puntualizaciones
(Eco y Fabbri 1978: 570-571):
a)
los destinatarios no reciben mensajes sino conjuntos textuales,
b)
los destinatarios no comparan los mensajes con códigos sino con un conjunto de prácticas textuales depositadas.
c)
los destinatarios no reciben nunca un solo mensaje, sino muchos, tanto en sentido sincrónico como diacrónico.
En
sentido sincrónico porque un mismo acontecimiento puede venir transmitido por distintos Mass media. En sentido
diacrónico porque una misma información es
recibida de forma redundante aunque de un modo diverso a lo largo del tiempo. En muchas ocasiones, un texto
nos remite, explícita o implícitamente, a otros
textos, produciéndose un proceso de intertextualidad. Eco (1987:10) nos recuerda que las teorías semióticas de la
recepción aparecieron hacia los años sesenta
en reacción a:
a)
el endurecimiento de algunas metodologías estructurales que pretendían poder dar cuenta del texto objetivamente en tanto
que objeto lingüístico.
b)
la rigidez de algunas semánticas formales que pretendían hacer abstracción de cualquier referencia a las situaciones, a
las circunstancias y al contexto de la emisión
de los enunciados.
c)
el empirismo de algunas aproximaciones sociológicas.
Sin
embargo, la confrontación disciplinar entre la semiótica y la sociología, a finales de los años 80, da paso a un diálogo interdisciplinar.
Esto hace que en el campo de la
comunicación las fronteras disciplinares se desdibujen y surgen por ejemplo el modelo sociosemiótico de la comunicación
(Rodrigo 1995: 101-145).
Fuentes
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